TALLER DE ESCRITURAS

BODA GITANA – 14.07.21

Pongo un cuento, breve, que ha gustado en el taller, aunque no especialmente a mí.

5.- MI INFANCIA – 14.07.21
PLANIFICACIÓN PREVIA PARA NOVELA

“Sólo vivimos en la infancia, luego nos limitamos a sobrevivir”.

Es una frase terrible; que preserva esa etapa, y marca las distancias con las que vendrán.


Me acuerdo que de pequeño, en casa de mis tíos oí a mi tía Carmen que preguntaba:

– ¿Dónde está el listín?…
Ni corto ni perezoso, contesté:
– ¡aquí, tía, en la cocina!
Como no lo veía cuando vino, me preguntó:
– Pepito, ¿dónde dices que está?
– ¡tía, que soy yo!, -le dije. Y se partían de risa.

Hoy ya no hay listines telefónicos, ni tíos en vida que se partan de risa.

Como cuando, todo convencido, comenté que me lo había pasado muy bien en la boda de mis padres. Lo que no entendía es por qué, aquí también todos, reían.

Creo que todo esto se lo debo a mi abuelo Paco, que siempre contaba historias que confundían la realidad y la imaginación.

Un día, estando en la montaña, oyó que lo llamaban, pero no conseguía distinguir a nadie. Al sentirse envuelto por una sombra, alzó la cabeza. Encima de él estaba, suspendido, un dirigible. Y desde allí un hombre le hacía señas.
– herr, herr, caballerro, por favorr, ¿parra irr hacia Malaga?
El teutón, con casco y casaca del imperio prusiano, y gafas de piloto, gestualizaba para hacerse ver.
Mi abuelo, acompañándose de los brazos, le voceó enérgicamente: ¡hacia allá, hacia allá…!
El hombre, agradecido (o para quitarse lastre), le tiró una caja de salchichas ahumadas. Se elevó y partió en la dirección. Hablamos de 1918.

A mi abuelo aprendí a quererlo cuando empecé a escribir. Igual que con las historias fantásticas, no paraba de meterse en negocios ruinosos, y lo pasábamos bastante mal.


TAREA PARA CASA: Falsear la memoria y la imaginación. Utiliza la frase: ”me acuerdo de…” para regresar a algún momento de tu infancia. Una vez localizado ese recuerdo, rememoramos los detalles, los nombres, sonidos, olores…etc. Nos sumergimos en ese recuerdo. Aquí nos vamos a la zona donde la memoria y la imaginación se juntan, y añadimos algo que no recordamos muy bien que sucediera, pero que igual sí que sucedió. Una vez en la zona brumosa, añadimos a la escena algo que segurísimo que “no” ocurrió. (Nadie debe detectar dónde está la mentira en ningún momento).


4.- El número – 14.06.2021
DESEQUILIBRIOS DEL PERSONAJE
El número Murcia. Sierra de Antequera, 1963

TAREA PARA CASA: un diálogo entre dos personajes y que se vea claramente el desequilibrio de uno de ellos.