IGLESIA DE SAN SALVADOR, MONASTERIO Y GRANJA – OÑA – BURGOS

19.03.2015

Pocos días en el País Vasco bastan para percibir el nervio que se gastan. Mucha gente por la calle,  las salidas de los colegios a tope,  los grupos de mamás con cochecitos de bebés…   La presión social -que sabiéndote de paso la percibes como anécdota-, las pintadas, los carteles de acercamiento de presos y hasta con los vecinos pre-ocupados en separar los residuos. Dan la impresión de que están por lo suyo, independientemente del nivel de radicalización o de la crisis, que también se nota.
 De los pocos lugares en que las iglesias, abiertas, se pueden visitar durante todo el día.

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Tras un agradable recorrido por la zona de Vitoria -Urquiola, Bergara, Durango, el monte Gorbea y Orduña- decidimos bajar, de vuelta, por Oña, en Las Merindades burgalesas. Pasamos del País Vasco a Castilla.


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Iglesia y Monasterio de San Salvador. Oña

El monasterio de San Salvador de Oña (Oña, Burgos) fue fundado en el año 1011 por el conde de Castilla Sancho García.

En 1033 por el voluntad del rey Sancho el Mayor de Navarra  el Monasterio pasó a depender de los benedictinos.

Además del valor histórico y patrimonial del conjunto, en el Panteón Real reposan, entre otros,  los restos de Sancho II El Fuerte (el del Cid, asesinado por Vellido Dolfos), el Rey de Pamplona Sancho III y otros nobles de la época.

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Es a partir de este momento cuando mayor desarrollo e influencia adquiere, y llegan a estar bajo su jurisdicción más de setenta monasterios e iglesias repartidos geográficamente por el norte de la provincia de Burgos, Cantabria y el valle del Pisuerga palentino. Fray Ponce de León en el siglo XVI instauró en el monasterio la primera escuela de sordomudos del mundo.

La invasión francesa primero y la desamortización de Mendizábal posterior son la causa de no pocas destrucciones y del abandono del cenobio por parte de la comunidad benedictina. A partir de 1835 la Iglesia de San Salvador se convierte en parroquia de la localidad dependiente del obispado y la Granja – Monasterio no volverá a ser rehabilitada y ocupada hasta que en 1880 fue adquirida por los Jesuitas como Colegio y Noviciado de la Compañía. En 1967 lo venden a la Diputación Provincial de Burgos, que convierte el establecimiento monacal en manicomio y granja agrícola.

En 2012 se celebra en la Iglesia de San Salvador la exposición de Las Edades del Hombre bajo el título de Monacatus.

Entonces pude visitar la exposición Monacatus, una maravilla, aunque con un enfoque excesivamente clerical. Y en la parte correspondiente al antiguo Monasterio- Granja, la Comunidad de Castilla y León montó un Aula de la Naturaleza de la que su principal mérito era visitar los adelantos hidráulicos y botánicos de los benedictinos y jesuitas en su época.

Pues bien, con esos antecedentes animo al resto del grupo a desplazarnos de nuestra ruta para visitar esas maravillas históricas y patrimoniales.

Llegamos un Domingo a mediodía y salvo los interesados en encontrar un sitio donde comer no se veía mayor movimiento en el pueblo. Preguntamos en la Fonda y no tenían ni idea de si se visitaba la Iglesia de San Salvador o no. Ni les resultaba familiar las preguntas sobre el Monasterio. Pensaban que había un psiquiátrico. En cualquier caso habría algún cartel con indicaciones.

Nos acercamos pues a la Granja- Monasterio. Un letrero señalaba los días y horas de visita. El problema es que la fecha era de 2012. La puerta del conjunto no estaba cerrada y entramos. Los edificios estaban abandonados y abiertos. Los accesos deteriorados y con escombros. No había un alma. Regresamos para probar suerte con la Iglesia de San Salvador.

En un cartel clavado con una chincheta ponía: «para visitar la Iglesia llamar al … «

A partir de aquí experimentamos una visita única a un lugar único en medio de la precariedad. Vino el voluntario, así nos dijo, al que le resultaba más cómodo esperar en su casa a que le llamasen. Son 3,50 euros por persona, pero no son para mí, precisó. Nos dio un audífono a cada uno y a partir de ahí la Iglesia, con sus obras de Arte, sus Tesoros Históricos y su magnífico claustro, eran nuestros.

El voluntario nos informó que las recientes lluvias habían provocado la ruina de varias zonas del Monasterio anexo. Era peligroso entrar, por los derrumbes…

Cuando, a nuestro aire, terminamos la visita el voluntario nos esperaba junto a una «paraeta» que nos tenía preparada, una mesita con pequeños recuerdos a la venta: unas pegatinas, varias postales, algún librito, estampas, etc.

No es para mí -nos precisó-. Es una selección que hago entre las tiendas del pueblo. No gano nada.


Cómo semejante patrimonio histórico y  monumental depende en España del párroco o del Obispo del lugar? Por qué El Estado, en este caso la C.A. de Castilla y León no asume la protección y custodia de semejante legado?

Quien quiera más información sobre el extraordinario valor monumental, artístico e histórico de San Salvador de Oña lo tiene accesible en Internet: Oña y muchos más…

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